¿Qué significa sentir que te estás cayendo mientras duermes?

Esa sensación de estar cayendo al dormir, acompañada muchas veces de un sobresalto o un “brinco”, es más común de lo que imaginas. Se conoce como sacudida hípnica o espasmo hipnagógico, y le ocurre al 70% de las personas al menos una vez en su vida.

No es una enfermedad, no es algo paranormal, ni significa que “te vas a morir dormido”. Es simplemente una reacción del cuerpo al pasar de la vigilia al sueño.

¿Por qué sucede esta sensación?

1. Transición del cerebro al sueño

Cuando tu cerebro empieza a relajarse, tus músculos también lo hacen. A veces, el cerebro interpreta esta relajación como si estuvieras perdiendo el equilibrio o cayendo, y envía una señal para que el cuerpo “despierte” de golpe.

2. Estrés y ansiedad

Las personas con altos niveles de estrés o preocupación tienen más probabilidades de experimentar estos sobresaltos nocturnos.

3. Cansancio extremo

Dormir poco o llegar demasiado agotado a la cama aumenta la probabilidad de que el cuerpo reaccione con una caída imaginaria.

4. Cafeína o estimulantes antes de dormir

Bebidas energéticas, café o ciertos medicamentos también pueden alterar el sistema nervioso y provocar estas sacudidas.

¿Es peligroso sentir que te estás cayendo mientras duermes?

En la mayoría de los casos, no es peligroso. Es algo natural del cuerpo y no requiere tratamiento. Solo puede ser motivo de consulta si ocurre con demasiada frecuencia o si viene acompañado de otros problemas del sueño, como insomnio, sonambulismo o apnea del sueño.

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¿Cómo evitar esa sensación?

✅ Mantén una rutina de sueño estable
✅ Evita cafeína y pantallas al menos 2 horas antes de dormir
✅ Practica técnicas de relajación antes de acostarte
✅ Reduce el estrés con respiración profunda o meditación
✅ No duermas extremadamente agotado.

Conclusión

Sentir que te estás cayendo mientras duermes es una reacción normal del cuerpo y, en la mayoría de los casos, no representa un riesgo para la salud. Es simplemente una desconexión mal sincronizada entre el cerebro y los músculos durante la fase inicial del sueño. Con buenos hábitos, suele disminuir.